Hotel muy normal, las habitaciones pequeñas y falta de mantenimiento, alguna noche en la habitación que nos toco que era delante de un jardín habían las maquinas de aire acondicionado y hacían un ruido terrible, respecto a la ubicación del hotel esta a 10 minutos caminando al metro y al centro de Londres una media hora y depende donde vayas como hay que hacer algún trasbordo se hace pesado, lo peor, es el traslado en nuestro caso desde el aeropuerto de Stansted, que es una hora y media y con varios trasbordos y depende la hora que llegues al aeropuerto para ir al hotel es mortal.
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